domingo, 3 de agosto de 2008

Como las olas

Hay personas que se te escapan, como las olas, y hay gente de la que sabes que, si algún día llegan a irse, te quedarás un poco más sola y más vacía. Ese dolor no desaparece: sólo se hace más sordo, hasta que vuelve a renacer con una canción, con un texto encontrado por azar o con el recuerdo de lo que jamás hicisteis juntos. Son presencias que el tiempo no borra porque se han quedado dentro... y no se definen por los años de convivencia, sino por la intensidad.


Siempre estoy despidiéndome.

2 comentaron:

Isabel Sira dijo...

Es duro, estar siempre despidiéndose.

Los viajes que no hice dijo...

Arwen, es un coñazo. Este texto lo escribí cuando una amiga se fue a Lisboa y ayer lo releí... y lo colgué. Vamos, que tiene sus añitos ya.

Random, cierto: también digo hola muchas veces. Y no creo que me despida de ti: ya estás en el quinto coño :P