Le conocí no sé cuándo, pero hace algún añito ya y yo venía de trabajar con un cámara que era un corcho andante, nada por aquí, nada por allá, y no me fiaba mucho de ninguno de ellos. Recorrí la sierra de Gata con él, que me iba nombrando árboles, me hablaba de la historia de distintas localidades y me presentaba a gente interesante, porque no perdona un rato de charla por una grabación cuando sabe que el trabajo va a estar finalizado a tiempo.
Ayer le vi y nos quedamos hablando un buen rato, de teatro, de libros, de autores, de cine y de Japón. Había olvidado cuánto me gustaba escucharle...
Brazos abiertos
-
Me he acordado muchas veces de la portada de este periódico de hace 10
años. Aquel 3 de septiembre de 2015 había una fotografía con un titular de
letra...
Hace 8 horas