Tú me tienes siempre, iba a decir. Pero es cierto: ya no me hablas de seguros en una radio, ni me paso a tomar un café por tu oficina, ni te abrazo lo que yo quisiera y necesito, ni me monto en tu coche ni quedamos a las diez para emborracharnos, ni llego al trabajo con seis cubatas en el cuerpo, ni hay motivo alguno para salir los lunes a las siete de la mañana ni repetir la jugada los martes, los miércoles, los jueves...
Ahora el teléfono me avisa cada vez que llego a Portugal y durante ese tiempo no lo hizo nunca porque la Raya no existía. Sólo sus ventajas: es una República y hay una hora menos. Nadie me manda mensajes poniendo a parir a mis entrevistados ni me río en directo por algo que nadie sabe, ni como queso a las tres de la mañana, ni confieso el efecto que tiene un chupito de ginja, ni me miro en tus ojos. Y hace mucho que no hablo de sexo guarro guarro guarro, ni me llamas roja ni te llamo facha.
Han sido las ferias de Cáceres y yo hacía un examen y vi la noria de lejos y me acordé de ti. De los brazos grandes y la risa franca y las charlas de política y de la vez que me reí cuando me dijeron que no te conocía del todo y que no confiara tanto.
Y bueno, niño. Ya no vivimos en el mismo sitio, pero me gusta tenerte, aunque sea de lejos y a ratos, como tengo a tanta otra gente importante de mi vida. Y te lo escribo en un bar, ¿ves? Hay cosas que no cambian nunca...
8 comentaron:
Guapa, seis cubatas son muchos cubatas... :P Sobre todo, por las seis bebidas gaseósas que acompañan... ¡No hay estómago que lo aguante!
¡Un amigo a tumba abierta! Eso sí que es un amigo.
:)
Como para no entender esto. Se te capta perfectamente, don't worry. Sólo que cada uno interpretamos, es lo bueno y lo malo de la lectura, ¿no? Besitos grandes.
Tu dura nostalgia, que no conozco aunque intuyo, me ha traído a la memoria este poema de Valente que te regalo:
"QUISIERA haber estado en los lugares en donde tú estuviste, en todos los lugares donde hay acaso aún o sobrevive un fragmento de ti o de tu mirada. ¿Sería este vacío tuyo lacerante lo que hace de pronto un espacio lugar? ¿Lugar, tu ausencia?"
P.D.: Tu hermano Nacho te dará recuerdos míos. ¡El cybermundo es un pañuelo!
Jeje yo también conozco a Nacho. Nos está frikeando a todo el mundo por el Campo Arañuelo.
Como dice Arwen, la lectura permite varias interpretaciones. Así que, si la lectura es literaria perfecto. Si es literal, ánimo. Todos pasamos momentos así.
Saludos
¡Por supuesto que no cambian! Hay cosas que siempre estarán, aunque sean en el recuerdo. Eso si, ya paso de hablar de seguros en ninguna radio... Que coñazo. Besazoooooooooooooooooo
Tupp, por eso la experiencia sólo duró un par de meses. O eso, o mi hígado. Y es que no hay nada como beber con tres hombres: tumban a cualquiera. Ahora, con dos copas de vino, ya estoy lista de papeles.
Arwen, pero existen las interpretaciones aberrantes...
Álvaro, era un mensaje para un amigo en cuya ciudad ya no vivo. Más que nostalgia, son recuerdos. Pero Valente siempre es bienvenido. Y sí: el mundo es un pañuelo. Llegué a ti por él, pero no supuse que lo averiguaras tan pronto. Claro que la discreción nunca fue su fuerte.
Achú, esto... No me ha pasado nada que no sea lo que le digo a Álvaro en el mensaje: es "sólo" un post para un amigo. (Nunca había pensado que sonara duro y que necesitara ánimos).
Alfredo, (que, para todos los demás, es el amigo al que le escribía), si es que, confiesa, sin mí ya no es lo mismo :P Beso, guapo.
Para mí la nostalgia, la melancolía, es una pesada carga. Una despedida, de un amor, de la familia, de un amigo, la pérdida de una rutina simple como cruzarte con alguien cada día, o hablar de sexo guarro guarro guarro con tu partenaire.
Por eso los ánimos. Yo acabo de despedir a una amiga. Ya no hay cervecitas a media tarde, ni ponemos a parir a los pesados moscones nocturnos, ni salimos del trabajo a fumarnos un cigarro en el recreo...
¡Vaya! La que necesitaba los ánimos era yo jeje... Ains....
Siempre tiendo a dar explicaciones. Y entonces iba a decir que no hay melancolía ni nada por el estilo, que sólo es un texto recordando hechos que ocurrieron (una época alcohólica) con un amigo al que quiero mucho, que por supuesto no es mi partenaire...
Pero al final, digo: bueno, en esto de los textos, cada cual se hace la imagen que quiere. Y eso es lo bonito, Achú: pena lo de las cervecitas por la tarde :(
Publicar un comentario