viernes, 27 de marzo de 2009

Equilibrio


La felicidad, a veces, sí, huele a azahar en Doña Elvira, porque hace muchos años que Santa Cruz no significa nada y que no duele y la luz amarilla se vierte a plomo sobre el puente de Triana y la orilla del río aún no está llena de mosquitos y se puede repostar en cualquier cafetería.

Sevilla y Madrid son las dos ciudades a las que más he escrito porque allí viven las dos personas que me faltan. Si estuvieran en otro lugar, ese lugar sería también mi casa y caminaría por las calles con esa plenitud y no querría encerrarme nunca entre cuatro paredes, catorce horas en los bares, caminando, viendo a los amigos por los que no pasa el tiempo, echando de menos el albero de la Alameda y los botellones a las once de la noche en El Salvador y sintiéndome en paz, completamente en paz y más yo, desde el justo momento en que veo la Giralda.

Equilibrio. Sevilla y Madrid se llaman equilibrio.

La imagen es de mi última visita a Sevilla: mi estampa favorita de la Giralda, desde el patio de banderas. Ya lo sé: no hago buenas fotos y ni siquiera las trato después con el Photoshop, porque no sé usarlo. Pero son mías.

11 comentaron:

Mary Lovecraft dijo...

Preciosa entrada, no pude evitar emocionarme a cada renglón, reconociendo cada lugar y situación descrita.

Mi equilibrio se llama Sevilla-Barcelona.

y sí, también echo mucho de menos mi ciudad.

un beso

p.d.: entré a través del blog de Uly, no pude evitarlo al ver en su listado de blogroll la miniatura de la foto y el título que ilustran tu entrada.

Puntos de vista y ... nada más dijo...

Yo soy de Barcelona y Lisboa. Contrapuntos peninsulares.

Unknown dijo...

Pues el finde del 29 de mayo (y 30 y 31) toca Wilco en Sevilla. Y sé que no te pilla lejos. Y pasaré todo el finde allí. Un té, unas cervezas o lo que se tercie, ¿no?
La verdad: hace un güevo, con g que no voy a Sevilla. La última vez no pasé de un polígono en el que tocaba Nada Surf y la anterior... igual hace ya 4 años.

Lo dicho, si te puedes escapar, concretamos. Un abrazo -y pronto habrá nuevo post-.

Anónimo dijo...

Hola¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Ay cómo echo de menos escuchar esa frase de: "Qué bien me sienta esta ciudad". Te echo de menos y tengo ya ganas de verte. Está pasando demasiado tiempo sin charlar contigo tranquilamente. Siento no haber estado en Sevilla, un beso enorme. Te quiero. Mª Carmen

Tyrion dijo...

Recordando una repetitiva canción de Los del Río: "Sevilla tiene un color especial". No es un color. Lo que Sevilla tiene es luz, mucha luz ;)

Los viajes que no hice dijo...

Mary Lovecraft, muchas gracias. Si vienes de parte de Uly, eres más que bienvenida...

Puntos de vista, tú, de extremos...

FLaC, hecho: nos vemos allí. Iba a ir el puente de mayo, pero viene gente a verme a Mérida al final, así que nos vemos a finales de mes.

Maricarmen, ese fin de semana no te vayas a ningún sitio... Dios, cuánto tiempo hace que no te veo, esto no puede ser... Además, tengo un montón de cosas que contarte.

Tyrion, cierto: mucha luz y ojú qué caló...

Unknown dijo...

Pues hablamos cuando se vaya acercando la fecha!
Un besazo!

Palmiralis dijo...

Vente pa'cá y déjate de frío.... Sevilla seguirá de vacaciones!!!!!!!!!!

Los viajes que no hice dijo...

FLaC, perfecto... Besos. Tengo ganas de verte.

Palmiralis, Sevilla siempre está ahí...

Wagnerian dijo...

Pero ésto es un robado, ¿no, O.?

Lo que me fascina de la foto es la falta de primates evolucionados. No hay ni uno. Estuve escarbando y ampliando el otro día, y nada. No hay nadie. Y aun así, Sevilla no aparece desolada. Prueba a hacer lo mismo en Madrid...

Feliz equilibrista eres, pues, ciudades complementarias totalmente...

Eso sí, el albero de la Alameda ya sólo está en nuestro recuerdo. Aunque el color sigue, solidificado, ahí.

Un beso.

Los viajes que no hice dijo...

Sí, es un robado a la Giralda. Y no, no había gente: tampoco hizo falta esperar mucho, aunque sí un ratito, para que se despejara la zona...

Me encanta esa vista.

Un beso.