viernes, 10 de diciembre de 2010

East Village



Recorro el East Village buscando mis sitios. El antiguo Fillmore Auditorium, ahora un banco, donde The Who estrenó Tommy y donde tocaron Pink Floyd y Jimi Hendrix; la 8th Street, con sus casas perfectas, la Cooper Union donde estuvo Mark Twain y donde Abraham Lincoln hizo ese discurso tan famoso de El derecho hace la fuerza. La Grace Church está cerrada a las visitas, así que me quedo sin ver por dentro la iglesia que proyectó James Renwick Jr con 23 añitos (el mismo que hizo la catedral de Saint Patrick): las librerías. He quedado con JoshNogales y Virginia. Virginia llega tarde, porque se ha encaramado en la 77 en lugar de en la Séptima. No sé ni cómo nos encuentra. Me gustan estos dos. Hablamos mucho. De la ciudad y de nuestras vidas. Acabamos en un Dallas BBQ tomando un cóctel con tequila, fortísimo, y carísimo, por cierto (el alcohol es muy caro en esta ciudad, ya me lo había dicho Begoña) que pretendemos, estilo español, llevarnos en un vaso de plástico hasta que la camarera nos recuerda que es ilegal. Debe de pensarse que en España somos unos borrachos.



Hoy, casi cuando me voy a ir, descubro otros de mis lugares favoritos de Nueva York: el Tompkins a la cabeza (y pensar que por poco no voy, porque estaba agotada cuando decidí caminar siete u ocho calles más allá y verlo al atardecer) y el East Village, con su St Mark's Place cuajada de gente...



14 de septiembre.