jueves, 14 de octubre de 2010

Historic Richmond Town y Ganas

El autobús 74 (S74) para cerquísima y en la puerta, creo. Cerquísima, al menos. Si alguna vez se os ocurre ir, preguntadle al conductor. Yo calculé que se tardaba una media hora, según ponía en mi guía, y vi un cartel indicador. En rojo. Y me bajé en la siguiente parada. Yo lo vi, lo juro que lo vi y lo juraré hasta que me muera pero, cuando desandé el camino del autobús (del que me apeé menos de un minuto después de haber visto el cartel), no estaba por ninguna parte.

Manhattan desde el ferry.

En Staten Island (al menos, por Richmond Road), hay muchísimos coches, pero nadie por la calle. En el bus, hombres y mujeres orondísimos y obesos, todos hispanos, negros e hindúes, cargados de pizzas. Y alguna chica menor de edad embarazadísima. Carteles en español para el seguro médico gratuito. Para tener buena higiene mental. Para informar de servicios sociales. Hay otra población con mucho menos glamour y más problemas.


Desde aquí se coge el ferry a Governor's Island, a la que al final no fui.

Estaba a punto de llamar a la puerta de una casa (por cierto, preciosas) cuando vi una estación de bomberos. Después de caminar hora y media por caminos acerados, caminos sin aceras, a la orilla de algún bosque y por otros sitios extraños, con los ojos bien abiertos y disfrutando del paisaje, encontré una tienda cuya dependienta (en inglés, claro, porque aquí ni dios habla español, salvo cuando no me atienden a mí) me dijo que me faltaban cinco minutos. Que en realidad eran diez. La crema para el dolor de pies que me compré es verdaderamente milagrosa, pero son las cinco de la tarde y no he comido.


Las dos son de Book & Cafe, de la comuna hippie Ganas.


Estoy en Book & Cafe, de la comuna hippie Ganas, un lugar precioso con un café exquisito. Son hippies, así que todos frisan los 60. Una mujer toca el violín, hay ordenadores (mando dos correos apresurados para que mis amigos sepan que estoy viva), cuadros y libros y más libros con unas sillitas con cojines. Es un lugar con mucha vida, la verdad.


La estatua desde el ferry.

3 de septiembre.